MONTFALCO MURRALLAT

 Montfalcó murrallat es un pueblo medieval de la provincia de Lleida. Se llega desde Barcelona por lasalida 520 de la autovia A2, es fácil de llegar.

Este pueblo se recorre en apenas 15 minutos, pero recorrerlo nos lleva a la Edad Media, su construcción se remonta al siglo XI y es un pueblo amurallado de apenas 15 casas la mayoría deshabitadas.

Está situado sobre una colina, su origen se remonta al siglo XI cuando el conde Bernat I repobló estas tierras que pertenecieron a los sarracenos. Cuenta con una leyenda donde se fomenta la resistencia de los habitantes de este pueblo. Alla por la Edad media, después de perder la batalla se refugiaron en su fortaleza, los musulmanes cansados del asedio se les ocurrió mandar con las catapultas trozos de pan con mensajes para desanimar a los ocupantes de la fortaleza, estos para demostrar que podían seguir resistiendo el asedio enviaron mensajes en peces vivos, que habían obtenido del cercano pueblo de Les Olugues a través de un tunel que los unía. Ante esta situación los asaltes abandonaron la fortaleza a la vista que no podían entrar.

Si nos acercamos a la fortaleza por la única puerta que nos encontramos, observamos que Montfalcó posee unos elevados lienzos de muralla difícil de sobrepasar en aquellos tiempos medievales.

Si seguimos en camino de ronda podremos observar la muralla que está muy bien conservada. Si decidimos dejar este paseo al final del recorrido, debemos entrar por la única puerta .

A través de ella accedemos a una plaza, donde se encuentra una gran cisterna donde se almacenaba el agua que caía de los tejados de las casas, porque están construidas adosadas a la muralla y con sus tejados dirigidos al centro de la plaza para poder recoger las aguas fluviales.

En la plaza se pueden observar las viviendas con arcadas, actualmente podemos ver que hay un restaurante y una casa rural.

Al entrar en la plaza podrás observar la cisterna que ahora está cerrada, podemos seguir por las calles de este pueblo y observar sus casas de piedras, túneles e incluso un horno comunitario.

Antes de acabar el recorrido, saliendo a la izquierda nos encontramos con una calle escondida que nos lleva a la puerta de la Iglesia de San Pedro, que está cerrada, pero la podemos contemplar desde el camino de ronda.

Si observamos desde fuera la muralla veremos que hay diferentes tipos de construcciones porque posterior al siglo XI, fue reconstruida después de los diferentes asedios que sufrió la población.

Un breve paseo pero con un poco de suerte, será un paseo solitario donde podrás ver con tranquilidad las construcciones medievales catalanas.