CASTILLO DE CARACENA E IGLESIA DE SAN PEDRO
El castillo de Caracena se encuentra encima de una colina a unos 1150m de altura, en el municipio del mismo nombre, a unos 83 km de Soria capital, y a media hora de otro de los castillos más majestuoso de la provincia, la fortaleza califal de Gormaz. Pertenece al partido judicial de Burgo de Osma.
El pueblo de Carena está prácticamente despoblado, pero durante la Edad media fue un pueblo que tuvo importancia en la comarca y sus tierras fueron disputadas.
En el siglo X fue una zona de luchas entre los musulmanes y los cristianos, la línea de la frontera entre el Al Andalus y la zona cristiana se iba desplazando, así Caracena iba pasando de unas manos a otras, con Almanzor las tierras fueron conquistadas por los árabes y hasta el siglo XI no volvieron a manos cristianas, se cree que fue en la campaña de Fernando I .
Se cree que el castillo se construyó por esta época en el siglo X como una campaña para reforzar la frontera árabe de la mano de Almanzor, se fortifico el castillo con murallas defensivas y se crearon atalayas como vigías para avisar de las incursiones cristianas.
En documentos del 1136 aparece Caracena, como cabeza de otras aldeas y como tierras de realengo, es decir que no pertenecían a ningún noble, sino al rey. Así que el rey Alfonso VII entregó estas tierras al obispo de Sigüenza a cambio de otro señorío.
Las luchas entre los prelados por estas tierras perduran en el tiempo, las quieren el obispo de Sigüenza y el de Osma, era tal el conflicto que el papa Alejandro III interviene en el conflicto recordando que la propiedad es del obispo de Sigüenza.
En el siglo XIV, Pedro I dio la villa a Pedro Ruiz de Villegas, de ahí pasó a Pedro de Luna, y pocos años después a la familia Tovar. Pero en el siglo XV la familia Tovar apoyaron a Juana la Bertraneja frente Isabel I, y hubo una guerra civil donde los partidarios de la Bertraneja perdieron, así que la villa pasó de manos de la familia Tovar a Alfonso Carillo de Acuña. El castillo se mandó que se destruyera.
Alfonso Carrillo de Acuña en 1492 lo vuelve a reconstruir y introduce almenas para el uso de la artillería como más adelante veremos en la discreción del castillo.
ARQUITECTURA
Las ruinas del castillo actual son del siglo XV, está situado en un cerro entre dos barrancos de los Pilones y el de la Garganta, está diseñado para defenderse con armas de fuego como lo demuestra las aspilleras.
Después de subir por su empinada ladera, nos encontramos con un castillo construido con mampostería con un doble recinto amurallado.
El recinto interior tiene forma de cuadrilátero y está rodeado por cinco torres, una de ellas es la del homenaje, que se sitúa el la dirección sudeste. En esta vivían los nobles del castillo.Aquí podemos ver lo que queda del patio interior:
La muralla exterior de mampostería tiene diez torres huecas que la rodean todo el perímetro, las torres tienen troneras por donde los soldados podían disparar para defenderse
Para entrar al castillo se hace por una puerta protegida por dos torres
Entre las dos murallas se puede observar un foso seco
Muy cerca de Caracena nos encontramos una atalaya de vigilancia se puede acceder a ella a traves de las escaleras y contemplar el paisaje.
IGLESIA DE SAN PEDRO
La iglesia que nos encontramos a los pies del castillo es la de San Pedro, preciosa joya del románico que ha sufrido varias reformas, se data que se construyó en el siglo XII.
Inicialmente era una nave con ábside y presbiterio, pero se le adoso una galería porticada de 9 arcos (en la dirección del castillo), algunos de estos han desaparecido como se ve en la fotografía sólo perduran siete. Según se ve la iglesia a la izquierda faltan dos arcos.
Al otro lado del perro se encuentra un canecillo donde se encuentra un cazador con la lanza. A la izquierda de la escena de la caza del jabalí nos encontramos con un animal fantástico seguido de una arpía que es n animal fantástico con cabeza humana, cuerpo de ave, pezuña de cabra y cola de reptil.
Más a la izquierda nos encontramos con una cara monstruosa con amplia sonrisa, son tres caras que comparten cuatro ojos se llama Trifronte. Este personaje ya aparece en la civilización celta representando al dios Lugh , representa en esta cultura el dios que prepara a los guerreros para la lucha. En el románico hay diferentes opiniones sobre lo que significan unos dicen que representan al diablo y otros a la trinidad, por el aspecto que tiene y si la relacionamos con los otros canecillos en mi opinión más bien representan al diablo.
Si los miramos podemos observar en el primero se puede ver un centauro con un arco escoltado por dos pájaros
El séptimo representa un labrado como de cestería , que también se han encontrado en otras iglesias de la zona como Tiermes y Silos.
Y el decimo capitel se trata de la caza de un jabalí donde el cazador es ayudado por dos perros, uno de los cuales aparece encima del jabalí.
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